Cantando me encantas

Me encantas. Me encanta, me encantas, me encantas… me encantas. Una y mil veces te lo he dicho, nunca de la misma forma, nunca con el mismo sentido nunca sintiendo lo mismo. Cada vez me encantas distinto porque yo soy distinto, porque te veo distinta y me encanta que me sigas encantando… y yo aSigue leyendo «Cantando me encantas»

Descendientes de la Patrulla Canina

Hoy en sesión un todavía niño me ha comentado que le disgustaba que una familiar que a menudo cuida de él critique airadamente a otras personas y que no entendía porque los “mayores” hacemos esas cosas. Le he dicho que no es algo que hagamos “todos los mayores” aunque sí tenía razón en que algunosSigue leyendo «Descendientes de la Patrulla Canina»

Punto y seguido para un Funambulista

Llego a estos días de fin de todo y otro año más no tengo la sensación de acabar nada, y este año mucho menos, pero sí de continuar, de seguir, sin saber muy bien hacia dónde ni tener muy claro el final (si es que lo hay) pero teniendo muy claro los siguientes pasos. YSigue leyendo «Punto y seguido para un Funambulista»

La edad de las camisas

Al acabar el día ayer uno de mis hijos me dijo “papá llevas la camisa arrugada” y hasta ese momento no me había dado cuenta. -Tú te la plancharías? -No papá, no lo haría. Esta arrugada porque has hecho cosas y si la planchas sería como no haberlas hecho y esta mañana ya la teníasSigue leyendo «La edad de las camisas»

Sesión para un Coach cobarde

Habíamos acabado la sesión y mientras la cerrábamos le reconocía los pasos que esta dando en su proceso… justo al levantarnos me dice “…es que mostrarse vulnerable duele” Y cómo es ese dolor? – le he preguntado mientras volvíamos a sentarnos… -Es un dolor incómodo, molesto… como una herida mal cerrada, parece curada por fueraSigue leyendo «Sesión para un Coach cobarde»

La edad de las mariposas

No me entenderás… no podrás si no te has sentido en un abrazo que no sabes cómo empezó pero sabes que no quieres que acabe. Y no podrás porque para sentirlo debes imaginarlo con todas tus fuerzas… hasta emocionarte en él, hasta sentir su piel y besarla suavemente… casi sin hacerlo pero dejando parte deSigue leyendo «La edad de las mariposas»